Cosas básicas para acertar en el depósito
Para encontrar un buen depósito, no siempre tenemos por qué recurrir a los catálogos de productos financieros, ya que es muy posible que existan fuera de ellos depósitos mucho más rentables y accesibles económicamente para los usuarios, pero siempre asegurándonos de que negociamos de manera adecuada con la entidad bancaria en cuestión.
Lo cierto es que la oferta respecto a los depósitos financieros se ha ido acortando con el tiempo, hasta tal punto que muchos de los que se ofertan no suelen encontrarse al alcance de todo tipo de usuarios, especialmente ahora, dada la crisis económica por la pandemia de Covid-19.
Por lo tanto, aunque buscar el mejor depósito financiero que se ajuste tanto a nuestras necesidades como a nuestro bolsillo parece una misión imposible, no por ello debemos rendirnos. Por ejemplo, si lo que buscamos son depósitos a corto plazo, los que más suelen demandar los usuarios, son los negociados. Parecen haber desaparecido por completo, pero realmente si buscamos a fondo podemos seguir encontrando ofertas.
Como negociar depósitos
En este tipo de depósitos, las condiciones particulares del mismo suelen negociarse de antemano, aunque en muchos casos no suelen comunicarse de manera directa al usuario, ya que dependiendo de su situación o sus exigencias, estas tienden a variar.
Sea como fuere, si nuestro objetivo es acceder a este tipo de depósitos, una de las primeras cosas que podemos hacer es consultar con nuestra entidad bancaria habitual, ya que quizás dispone de una oferta interesante. Normalmente, no suele ser el caso, porque la gran parte de las entidades bancarias no suelen mostrarse muy abiertas a negociaciones, a no ser de que se hagan bajo imposiciones muy elevadas. Aún así, hay entidades dispuestas a negociar con sus usuarios, por lo que nunca está de más consultar y preguntar, por si ese fuera el caso de la nuestra.
Por supuesto, ante todo hay que ser realistas, y tener claro que suele resultar extremadamente complicado acceder a este tipo de depósitos con imposiciones bajas o medias. Es por ello que debemos explorar también otras opciones financieras para descubrir si los depósitos son realmente el producto que más nos conviene, o si por el contrario debemos continuar con nuestra búsqueda.
Además, para encontrar el depósito que mejor se adapta a nuestras necesidades y exigencias, es clave tener claro todo lo que estamos buscando exactamente en ellos. Es decir, nos encontramos ante un producto financiero que, a día de hoy, dispone de un nivel de rentabilidad muy inferior al que disponen otro tipo de productos. De hecho, a largo plazo ni siquiera resultan rentables para muchos usuarios.
Es por esta razón que no podemos exigir a estos productos aquello de lo que no disponen. Al fin y al cabo, debemos ser objetivos y tener en cuenta que el mercado de los depósitos ha cambiado mucho en los últimos años, y así como en el pasado las entidades bancarias solían ofertar este tipo de productos con mucha facilidad, hoy se muestran difícilmente accesibles económicamente hablando para la mayor parte de usuarios.