Llevamos años hablando de lo mismo, pero ahora va en serio: tu dinero parado en la cuenta ya no es una opción. No si quieres que no se lo coma la inflación. Por eso, en 2025, hay dos fórmulas que están volviendo con fuerza para los que buscan rentabilidad sin complicarse: los depósitos a plazo fijo y las Letras del Tesoro.
Y sí, puede que pienses que son lo mismo, que los dos te devuelven un poco más de lo que metiste. Pero no. No es tan simple. Hay diferencias, y algunas pueden marcar la diferencia entre ganar y perder dinero.
Vamos a poner orden, porque este tema está más vivo que nunca.
¿Qué cambia entre un depósito y una Letra del Tesoro?
Los dos productos tienen algo en común: tú prestas dinero y, pasado un tiempo, te lo devuelven con intereses. Hasta ahí bien. Pero lo importante es cómo lo hacen y quién está detrás.
El depósito lo contratas con un banco. Tú eliges cuánto tiempo dejarás el dinero (3 meses, 6, un año…) y ellos te dicen cuánto te pagarán a cambio. Lo bueno es que sabes exactamente qué vas a ganar. Lo malo, que muchas veces si lo sacas antes te penalizan, o directamente pierdes los intereses.
Las Letras del Tesoro, en cambio, las compras al Estado. Literalmente, le estás prestando dinero al Gobierno español. Y como el que marca el tipo de interés es el mercado, la rentabilidad va cambiando en cada subasta. No es fijo, pero suele estar bastante claro si sigues la evolución.
Y hay otro detalle: con las Letras, si necesitas el dinero antes, puedes venderlas. No es gratis, claro. El precio dependerá del momento y puede que pierdas algo, pero al menos tienes esa opción.
En 2025, ¿Qué da más dinero?
Pues ahora mismo la cosa está así:
- Los depósitos bancarios están ofreciendo entre un 2,5 % y un 3 % TAE, dependiendo del plazo y del banco. Algunos, como Mediolanum, están lanzando promociones al 4 %, pero ojo, que no son para todos y hay condiciones.
- Las Letras del Tesoro están rondando entre el 2,1 % y el 2,3 % anual, según la duración (3, 6 o 12 meses). Las últimas subastas han bajado un poco respecto al año pasado, pero siguen siendo interesantes.
Así que si vas al grano: los depósitos ahora están pagando algo más, aunque no por mucho. Pero ojo, no solo es la cifra lo que importa.
¿Cuál me interesa más?
Buena pregunta. No hay una sola respuesta. Depende de tu situación.
Si buscas algo seguro, sin complicaciones, y no vas a tocar el dinero en meses, un buen depósito puede ser tu opción. Sabes lo que cobras, no tienes que hacer malabares, y si está bien contratado, no tiene comisiones ocultas.
Si en cambio prefieres algo más flexible y con el respaldo del Estado, las Letras pueden darte tranquilidad. Te permiten salir antes (aunque con algo de riesgo si lo haces), y hay quien se siente más seguro prestando al Estado que a un banco. Sobre todo si hablamos de cifras altas.
Y luego está el tema fiscal, que no cambia mucho: en ambos casos, los intereses tributan en el IRPF como rendimientos del capital. A partir de los 6.000 euros, te retendrán un 21 %, y si subes de 50.000, pasas al 23 %. Así que no te olvides de contar con Hacienda cuando hagas cálculos.
Tu dinero tiene que moverse
Lo que no tiene sentido en 2025 es dejar el dinero en la cuenta esperando que “algo pase”. Los depósitos y las Letras del Tesoro están ahí, son productos sencillos, y si eliges bien, te pueden dar más de un 3 % sin asumir apenas riesgo.
Pero eso sí, no vayas a lo loco. Mira bien plazos, condiciones, comisiones y lo más importante: que entiendas en qué estás metiendo el dinero.
Porque ahorrar está bien, pero ahorrar con cabeza, está mucho mejor.